La ciudad en que vivimos es el resultado de la superposición y entrelazamiento de sucesivos y habitualmente inconexos actos de construcción, reconstrucción y destrucción, donde en el largo plazo el cambio es la norma y donde las cosas que permanecen por más tiempo -entre ellas, el suelo original y las trazas superpuestas de sucesivos asentamientos-, van conformando la matriz de un escenario donde conviven, en presencia sincrónica, elementos nacidos en tiempos diferentes y cargados a su vez de significaciones muy diversas. Pero en la memoria de la ciudad -que no en su imagen-, también deberían estar los proyectos frustrados, los que nunca tomaron forma, o también aquellos que llegaron a concretarse parcialmente y de los que hoy apenas quedan vestigios. De esas ilusiones y de esas frustraciones tal vez podamos sacar lecciones útiles para orientar de mejor modo nuestra tarea presente de hilvanar pasado con futuro. Vayan aquí algunos ejemplos: 

(I) DE CÓMO PUDIMOS TENER UNA CIUDAD VIEJA DOS VECES MÁS GRANDE QUE LA ACTUAL  http://blogs.montevideo.com.uy/hnnoticiaj1.aspx?1317

              Montevideo, nacida como “plaza fuerte” y no como “ciudad-puerto”, empezó a tomar forma entre 1724 y 1730. Domingo Petrarca conocía el lugar como nadie y tenía la formación técnica adecuada para definir la matriz del asentamiento y orientar su crecimiento. Pero si bien su trazado inicial hizo historia (la “manzana oriental” de 100 varas nació con él), su propuesta de ubicación de la línea defensiva sobre tierra firme fue desestimada luego de su muerte. Un error aún inexplicado, que embretó a la ciudad y tuvo luego nefastas consecuencias.  

(II) UN INTENTO DE PONER ORDEN EN LA PLAZA MAYOR    http://blogs.montevideo.com.uy/hnnoticiaj1.aspx?1318

             En Montevideo, al igual que en Buenos Aires, la Plaza Mayor  fue también en el origen la plaza del mercado. En la primera década del siglo, allende al Plata, la gran plaza bordeada por el Fuerte, el Cabildo y la Catedral, quedó dividida en dos por la construcción de un cuerpo de “recobas” donde se concentraba la actividad comercial. Igual intención llevó a Thomás Toribio a proyectar para nuestra Plaza Mayor un sistema perimetral de “recobas” (claro que con formalización estrictamente “neoclásica”, sin concesiones barroquistas). En Buenos Aires marcaron el límite de la Plaza de la Victoria hasta fines del siglo XIX…entre nosotros, no llegaron a pasar de los cimientos (y por causas que hoy serían tema de la Junta Anticorrupción).

(III) DERRIBANDO LAS MURALLAS...¿O PERDIENDO UNA OPORTUNIDAD ?    http://blogs.montevideo.com.uy/hnnoticiaj1.aspx?1320,

            En “Los orígenes de la nacionalidad uruguaya”, Carlos Real de Azúa repasa con rigor –y creo que con preocupación- los relatos que nuestra historiografía ha tejido sobre el proceso de gestación de nuestra vida independiente. En correspondencia con la visión del “separatismo predeterminado”, la temprana decisión de demolición de las murallas se ha visto como una expresión de ruptura y autoafirmación de soberanía. Las cosas fueron seguramente más complejas, pero entre los varios “olvidos” de los sucesos de esos tiempos revueltos, conviene rescatar en especial la propuesta de un Licenciado en Medicina, planteando para la ciudad un desarrollo “bipolar” digno de la mayor atención (atención que por supuesto no tuvo en su momento…y tampoco después)

(IV) ¿UNA GALERIA COMO EN NÁPOLES O MILAN...?   http://blogs.montevideo.com.uy/hnnoticiaj1.aspx?1321

                  No estuvimos tan lejos de tenerla. Don Daniel Muñoz, que había hecho en su juventud cientos de crónicas sobre la ciudad y su gente (firmando “Sansón  Carrasco”), asume entre 1909 y 1911 el recién creado cargo de Intendente Municipal y da pleno apoyo al proyecto del italiano Guidini para crear un espacio de articulación entre las plazas Constitución e Independencia, lejos entonces de la preocupaciones institucionales de Zucchi, pero muy cerca en cambio de las imágenes gratas a la cultura hegemónica del 900 (que parecía asentada para siempre, pero que poco duraría). El proyecto no llegó a concretarse; pasaron más de 70 años antes de que volviera a privilegiarse el carácter peatonal del área…pero no hay indicios de que algún día veamos la cubierta vidriada que imaginaran Muñoz-Guidini.

IMAGEN DE PORTADA: fachada del proyecto de "ampliación y reforma" del Cabildo de Montevideo, según propuesta de Guidini, asumida como buena por Daniel Muñoz (aunque usted no lo crea...)