La maestra, en la escuela nos enseñó que había diferentes tribus: Charrúas, Arachanes, Bohanes, Guenoas, Yaros, etc. Pero, que cuando habían llegado los conquistadores, habían acabado con todos, y que por lo tanto en Uruguay, no quedaban más indios, a diferencia de Argentina, Perú, Bolivia, México, que sí quedaba descendencia de los incas, mayas y aztecas.
Por lo tanto forjamos nuestra “identidad nacional” en un prototipo mezcla de candombero/carnavalero (el negro),y los inmigrantes españoles e italianos.
“A nosotros no nos quedan más indios” pensaba yo de niña, y aquello era una incógnita muy grande.
Y, supongo, para todos, puesto que el prototipo del uruguayo, descendiente de uruguayos, era bastante difuso.
Pues bien.
Muchos años más tarde, de otras investigaciones surgía otra verdad: Sí quedan descendientes de nuestros indios.
Entonces, ¿Porqué ese afán de tapar el sol con un dedo y seguir asociando al uruguayo con el Carnaval y el Candombe, cuando estos fenómenos venían de los esclavos negros?
La conocida historia de que los cuatro últimos charrúas fueron llevado a Europa, concretamente a Francia y no sobrevivieron parecería ser la única e irrefutable verdad.
Pero lo cierto es que cualquier estudio antropológico devela que obviamente esto no puede ser tan tajante.
Pues sí: Quedan descendientes de charrúas, que fueron haciendo mezclas con blancos, generándose descendencia.
Y también en Francia hay personas con rasgos charrúas.
Entonces:
Uruguayo está indisolublemente asociado a charrúas, yaros, bohanes, arachanes, etc.
Los Fogones Artiguistas.
Con el Genocidio Indígena (1831) comenzó un proceso atroz que siguió con el alambrado de los campos consolidando la injusticia del latifundio.
La pradera, sin embargo conservó la memoria de una propuesta solidaria, multicultural. Artigas no es un milagro inexplicable, no es la perfección de un tiempo imperfecto. Es la expresión de la alianza en pie de igualdad de los pueblos originarios no imperiales con los afroamericanos, las nuevas comunidades indio cristianas, los criollos discriminados, los mestizos y los mulatos, todos ellos enfrentados a la opresión colonial y a la opresión de las nuevas oligarquías criollas en alianza con Inglaterra.
Las primeras acciones libertarias en las trece colonias norteamericanas, en pleno siglo XVIII, las emprendieron patriotas disfrazados de indios; en los fogones artiguistas se cantaba: “Cielito clelo que sí/tómense su chocolate/aquí somos puros indios/ y sólo tomamos mate”, y se usaba la vincha blanca porque el blanco era el color charrúa para la declaratoria de la guerra.
Después, cuando el artiguismo fue desterrado, San Martín le dijo a las provincias: “un genio maléfico os ha inspirado la idea de federación”, y Rivera, justificando el genocidio indígena, comparaba a los charrúas con los iroqueses para explicar porqué su destrucción era inevitable.
Los últimos charrúas.
Los sufrimientos padecidos por un grupo de charrúas, que fueron objeto de curiosidad y manipulación francesa, guardan como único reconocimiento un homenaje y una historia poco difundida que el monumento a Los Ultimos Charrúas, ubicado en el Prado de Montevideo (sobre la Avenida Delmira Agustini) nos revela.
Esta obra estuvo a cargo de tres escultores uruguayos: Edmundo Prati, Gervasio Furest Muñoz y Enrique Lussich. El material empleado fue bronce y para el basamento se utilizó granito rosado. El monumento, iniciativa de Baltasar Brum, en 1930, quedó terminado recién en 1938. En él se representa al grupo de cuatro Charrúas, con sus vestimentas características, que rodean un fogón en el que se calienta un caldero. A la izquierda se observa al curandero Senacua Senaqué, que sentado sostiene un mate en la mano derecha. Detrás, de pie, el cacique Vaimaca Pirú, le sigue María Micaela Guyunusa, sentada, con una niña en su falda. Delante de ella se encuentra la figura del guerrero Laureano Tacuabé Martínez. El monumento lleva una placa con el título "Indios Charrúas". A cambio de cinco francos.
Estos cuatro indígenas del territorio oriental integraron un grupo llevado a Francia por el capitán François Curel, presidente del Colegio Oriental de Montevideo. Los charrúas partieron el 25 de febrero de 1833. El argumento del capitán francés para el traslado de los indios fue variado, presentarlos ante el rey de Francia, sociedades científicas, personas distinguidas e ilustres y realizarle estudios antropológicos. Pero las intenciones resultaron otras, pues en el mes de mayo, ni bien llegaron a la ciudad luz, los Charrúas fueros exhibidos como una rara especie de animales y para ello se instaló una toldería. La posibilidad de observarlos consistía en el pago de cinco francos.
Vaimaca tenía 55 años, fue soldado de Artigas y estuvo luego al mando de las huestes de Rivera. Tenía una relación muy estrecha con Senaqué, médico indígena y jefe religioso, que en el momento de la partida se estima tendría entre 56 y 57 años. Ambos no se adaptaron al cambio de ambiente, extrañaron a su familia y no soportaron los malos tratos, dejándose morir, sumidos en la depresión.
La causa de la muerte de Senaqué, en el mes de junio, fue fiebre, cansancio y debilidad. Dos meses más tarde y en iguales condiciones deja de existir Vaimaca.
Guyunusa de 26 años, a los cuatro meses del arribo a París, dio a luzuna niña, hija de Vaimaca Pirú. Ellas dos, junto a Tacuabé (23 años) fueron liberados gracias a la gestión de un grupo de damas horrorizadas por el trato dado a los indígenas.
Guyunusa muere de tuberculosis en el Hospital de Lyon, en julio de 1834. Tacuabé huyó con la niña, desconociéndose su paradero.
CHARRUA
Los charrúas fueron un pueblo indígena originario del territorio delimitado por el Río de la Plata, el río Uruguay hasta el río Ibicuy (sur de Brasil en América del Sur). Posteriormente a la invasión española, algunas familias se desplazaron hacia zonas meridionales de la Mesopotamia argentina y quizás zonas costeras del río Paraná medio.
Fueron, junto con los chanaes, los guenoas y los yaros, los primeros habitantes históricamente conocidos de las tierras del actual territorio del Uruguay. Los charrúas también habitaron el centro-este de la provincia de Entre Ríos, el sureste de la provincia de Corrientes y la campaña riograndense (las 'pampas' de Río Grande del Sur).
Asimismo, otra parcialidad de los charrúas (los martidanes) vivía en Entre Ríos, Argentina de la que se conoce muy poco.
Además de los charrúas propiamente dichos, pertenecían al mismo grupo étnico los minuanes y los guenoas que formaban un mismo grupo también denominado guinuanes. Los bohanes son considerados por algunos estudiosos como relacionados a los yaros de origen káingang y por otros como integrantes del grupo charrúa. Los chaná-timbú-beguá, muy parecidos a los charrúas, eran posiblemente, el producto de reiterados mestizajes y aculturaciones entre pámpidos y láguidos, en las costas paranaenses de la provincia de Santa Fe habitaban los calchines quienes también son considerados de filiación charrúa.
Al momento de la llegada de los españoles, los charrúas dentro del actual territorio uruguayo ocupaban el área al norte y al sur del Río Negro (o Hum) y se acercaban a la costa en el actual departamento de Rocha. Los minuanes estaban en la costa argentina del río Uruguay al norte de la desembocadura del Río Negro. Los actuales departamentos uruguayos de Río Negro y Durazno eran ocupados por los yaros. Los bohanes se hallaban en los departamentos de Paysandú y Salto, sin embargo, algunos mapas jesuíticos los ubican en Entre Ríos, por lo que es posible que algunas de sus parcialidades hayan cruzado el río Uruguay. Los guenoas estaban en la zona de los departamentos de Tacuarembó, Treinta y Tres y Cerro Largo extendiéndose también por el el río Ibicuy, al sur del Brasil.
Posteriormente a la fundación de Montevideo, los charrúas se desplazaron hacia el norte absorbiendo a yaros, bohanes, guenoas, chanás y minuanes quedando prácticamente confundidos con ellos, por lo que usualmente se les ha designado a todos estos grupos genéricamente como charrúas.
La mujer charrúa nativa la que se relacionó con los hombres europeos y dio origen a los primeros mestizos, que en general, adoptaron una cultura intermedia y fueron conocidos como "gauchos", en el caso de los hombres, o "chinas", en el caso de las mujeres. Estas últimas continuaron viviendo en las tolderías charrúas, y a su vez, se siguieron mezclando con los colonizadores blancos así como también con guaraníes, complejizando aún más el proceso de mestizaje.
Origen del nombre Charrúa.
Tras el vocablo "Charrúa" se han postulado diferentes versiones de su origen, la mayoría de ellos despectivos, a saber “Los arrebatados”; “Los destructores”; “Los jaguares”; “Los mutilados”, y otros un poco más románticos como “Los acuáticos” o “Los pintados”. Lo cierto es que epítetos no faltaron por parte de los extranjeros, respecto a cómo identificarlos. Sin embargo, nada se sabe aún respecto a cómo se autodenominaban los integrantes de esta familia nativa.
Recientes estudios demuestran que “charrúa” no es una palabra de origen americano y mucho menos indígena. Este término existía antes del descubrimiento de América, y se usaba para denominar un tipo de máscara existente en algunas comunidades gallegas y cuyo origen se remontaría a la prehistoria, probablemente para ser usadas en fiestas populares, como el carnaval. Quienes usaban en Galicia estas máscaras llamadas charrúas, se disfrazaban y pintaban de manera llamativa, mientras gesticulaban con cierta agresividad.
La colorida vestimenta de los indígenas que los europeos invadieron en las costas del Río de la Plata, así como su rostros pintados a modo de máscaras junto a extraños gestos, rememoraron en los navegantes españoles a aquellos gallegos que se disfrazaban en sus fiestas con sus máscaras denominadas charrúas. En poco tiempo el término se popularizó y fue adoptado de ahí en más hasta nuestros días.
Cultura
Pertenecían al gran conjunto pámpido, teniendo fisiotipos y cultura material muy similar a la het o pampas antiguos, a la de los tson'k o patagones, a la de los qom'lek y a la de los kadigüegodí, para hacer mención sólo de algunas de las etnias que habitaban la gran Llanura Chacopampeana y la Patagonia Extraandina. Sin embargo, hacia el siglo XV recibieron importantes influjos culturales de un pueblo amazónico el de los avá o guaraníes. De modo que mucho del léxico actualmente conocido del idioma charrúa deriva de aportes lexicales del avañe'é o guaraní, como son la toponimia y los nombres propios, al mismo tiempo que el lugar donde habitaban refería a: "Río de los pájaros pintados" (en guaraní).
Sociedad
Básicamente los charrúas no eran pacíficos; tenían una organización social muy fuerte, organizadas en jefaturas (esto es: gobernadas por un 'cacique', jefe que aunque solía pertenecer a un linaje debía ser electo y consensuado permanentemente por el conjunto), donde los vínculos interpersonales eran muy importantes y conservaban la filiación poligámica.
Esto quiere decir que los charrúas vivian en grupos los cuales tenia un líder al cual le tenían que hacer caso en todo.
Economía
En el momento de la conquista española su modo de producción era cazador-recolector, aunque rápidamente supieron desarrollar un complejo ecuestre y, con este, una cierta ganadería basada en los bovinos y equinos. Dado el modo de producción (cazador-recolector) era una etnia (2) de "nómadas" -como lo eran casi todos los otros pampidos-, por lo que los únicos vestigios materiales de su civilización son pequeñas vasijas de barro así como parte de sus armas típicas, lanzas, flechas y boleadoras, esta última uno de los objetos más típicos de la región. Estaban conformadas por dos o tres bolas de piedra, unidas por un trozo de cuero de aproximadamente un metro, en un nudo común. Eran utilizadas para cazar principalmente el ñandú, ave típica de la mayor parte del Cono Sur, similar al avestruz pero de menor tamaño.
Historia
Opusieron tenaz resistencia a la colonización española, siendo el primer episodio conocido la muerte de Juan Díaz de Solís durante su descubrimiento del Río de la Plata, aunque, según los cronistas españoles, Solís padeció ante una "tribu antropófaga". Dado que la antropofagia es prácticamente desconocida en la etnia charrúa, muchos suponen que la muerte de Solís puede haberse debido a un grupo de linaje amazónido que se encontraba en ese entonces merodeando las riberas platenses, sin embargo tradicionalmente se ha atribuido a los charrúas este hecho. El cronista de la expedición del adelantado Pedro de Mendoza, Ulrico Scmidel, describió a los charrúas en su obra Viaje al Río de la Plata'llamándolos zechuruass:
Así pues, con el favor de Dios llegamos al Rio de la Platta el año 1535. Allí nos encontramos con un pueblo de indios llamados zechuruass que constaba como de unos 2.000 hombres, y que no tenían más de comer que pescado y carne. Estos al llegar nosotros, habían abandonado el pueblo huyendo con mujeres e hijos, de suerte que no pudimos dar con ellos. Esta nación de indios se anda en cueros vivos, mientras que sus mujeres se tapan las vergüenzas con un paño de algodón que les cubre desde el ombligo hasta la rodilla.
La epopeya de la oposición a la conquista española por parte de esta etnia ha dado lugar a varias obras literarias, como la conocida Tabaré, escrita por el poeta uruguayo Juan Zorrilla de San Martín. Los charrúas supieron revistar entre las tropas del prócer José Gervasio Artigas, ya contra los españoles, ya contra los portugueses, ya contra los brasileños.
A mediados del siglo XVIII, fueron fuertemente diezmados en la campaña punitiva llevada a cabo por José de Andonaegui.
En 1715 la expedición del teniente García de Piedrabuena menciona que encontró sobre el arroyo Calá en Entre Ríos, 25 toldos de yaros y bohanes.
En noviembre de 1749, el teniente de gobernador de la ciudad de Santa Fe, Francisco Antonio de Vera Mujica aprehendió 339 charrúas que habían escapado del territorio uruguayo, entre ellos los caciques Maigualen, Gleubilbe y Dóienalnaegc, que fueron trasladados a las cercanías del río Salado en Santa Fe, dando origen al pueblo de Nuestra Señora de la Concepción de Cayastá fundado el 17 de setiembre de 1750 en el lugar donde estuvo situada la primitiva ciudad de Santa Fe (Santa Fe de Luyando) y la efímera reducción de San Francisco Javier de los mocovíes en 1743. Otra expedición de Vera Mujica en enero de 1752 sobre la provincia de Entre Ríos, tomó prisioneros a 53 charrúas que fueron repartidos entre los expedicionarios para su servidumbre. La reducción de Nuestra Señora de la Concepción de Cayastá desapareció hacia 1820.
El genocidio del Salsipuedes
Artículo principal: Matanza del Salsipuedes
Esta actitud persistente hizo que fueran paulatinamente diezmados, hasta culminar en 1831 con la matanza a orillas del Arroyo Salsipuedes perpetrada por el Gral. Fructuoso Rivera, primer Presidente del Uruguay y su sobrino Bernabé. Esta matanza, fue organizada en virtud a un acuerdo realizado por el Gral. Rivera con los Portugueses. El mismo consistió en la entrega de tierras del Uruguay a los portugueses, las que hoy se extienden desde la actual frontera con Brasil (Laguna Merín) hasta la actual Ciudad de Porto Alegre, a cambio de mantener la "Paz" y asegurar el liderazo de Fructuoso Rivera, logrando así ser el primer Presidente del Uruguay.
De esa matanza escaparon muy pocos individuos —básicamente quienes, desconfiando de sus intenciones, no concurrieron al encuentro propuesto por Rivera— y se los tuvo por exterminados a partir de un episodio muy triste en la historia uruguaya: el envío a París, a efectos de ser estudiados, de Los últimos charrúas, pequeño grupo formado por una mujer y tres hombres. Sus nombres eran Senaqué, Tacuavé, Vaimaca Perú y Guyunusa.
Un caso aparte fueron los niños pequeños que fueron repartidos como criados (siervos) de las familias de origen europeo.
Supervivencias culturales
En el año 2002 los restos del jefe Vaimaca Perú fueron traídos desde Francia y recibieron sepultura en el Panteón Nacional, en un gesto que ha motivado protestas de grupos que buscan honrar la memoria de los primeros habitantes del lugar. En particular, debe mencionarse que existen numerosos descendientes de aquella nación, aunque sean un pequeño porcentaje de la población uruguaya. Se concentran, sobre todo, en la ciudad de Guichón, cercana a la zona dónde se perpetró la matanza.
En las costas del Paraná medio, en territorios de la provincia argentina de Santa Fe habitaban los calchines (no confundir por paronomasia con "calchaquíes"), pequeña parcialidad que se considera era de etnia charrúa, aunque probablemente mixogenizada con otro pueblo afín, el de los ya mencionados chanás.
Dado que la de los charrúas fue la etnia más conspicua que habitó el territorio de la actual Uruguay, coloquialmente los uruguayos u orientales son llamados "charrúas". En la actualidad y de acuerdo recientes estudios del ADN , se establece que más del 40 % de la población del Uruguay tiene sangre Charrúa.
Asimismo, en la provincia de Entre Ríos en Argentina, existen grupos de descendientes de charrúas mestizados que se encuentran en proceso de recuperación cultural, en las ciudades de Villaguay y Nogoyá.
1: es común que se use para todos los "indios" la palabra arawak taina "cacique", pero esta es una generalización incorrecta (lo mismo que la palabra "indios"); con "cacique" se suele mezclar a muy diferentes modos de gobierno entre los aborígenes americanos, en el caso de los charrúas (como en otros pampidos, etc.) la palabra correspondiente en antropología es de jefatura con jefes semihereditarios.
2: de modo análogo al anterior, es común que se use la palabra "tribu" para toda población que desde un etnocentrismo europeo haya sido considerada "salvaje" o "primitiva" e incluso, se llama "tribu" a sociedades estatales urbanas muy complejas como las de los mayas, aztecas, quechuas, chibchas, etc. En antropología se prefiere hablar de etnias, sean o no europeas.
Ultimos Datos de los Charrúas.
“Finalmente, la mujer que acompaña esos tres Charrúas, y que es de la misma tribu,se llama Guyunusa; formaba parte de la última concentración destruida por el generalRibéra; fué conducida presa con algunas de sus compañeras, al mismo tiempo que Péru y Sénaqué. No hemos podido procurarnos ninguna información sobre lo que la concierne personalmente; parece haberse encariñado con el joven Tacuabé.”
Los Charrúas son visibles todos los días,excepto el sábado de las 3 a las 6 de la tarde, Allée d’Antin, N° 19,Campos Eliseos.Precio de entrada: 5 Francos por persona”.
“(…) Al principio se han sentido un poco desconfiados ante la presencia de 15 o 20 extraños. Sin embargo poco después se sintieron más cómodos y como entendían y hablaban bastante bien el español y el portugués pudieron responder a las preguntas que les formularon algunos de los visitantes. (…)”
“(…) Los Señores comisarios nombrados por la Academia de Ciencias y la de Ciencias Morales y Políticas, deseando juzgar el efecto que la música produciría sobre los Indios-Charrúas, han ido el miércoles pasado, a visitar a esos salvajes. El Sr Berton había conducido con él algunos profesores de las orquestas de la Academia de música y del conservatorio, entre los cuales destacamos a los Señores Tulou y Meifred” (…) “Han sido sobretodo muy sensibles a algunos solos de flauta y de trompeta que el Sr Tulou y uno de los profesores que lo acompañaban han accedido hacerles escuchar”
“Tacuabé parece abierto y bueno, su mirada es vivaz, dulce e inteligente. Habla con facilidad a cualquiera que se le acerque y de una manera decente y amistosa; escierto que ha hecho unas muecas bastante feas a los Señores Acádemicos que querían mirarlo de demasiado cerca y someterlo al análisis de su lente; pero ese día me confesó que había tomado un trago de más y que además no le gustaba ser examinado como un animal escaso, y que los curiosos de esa estirpe le molestaban, ese era al menos el sentido de su pésimo español. Este sentimiento, totalmente humano, me pareció extremadamente honorable para él. Pero abórdelo con confianza, háblele de los temas de sus estudios, como las armas, los caballos; objetos de su agrado, como las mujeres y el aguardiente, ofrézcale una pipa de tabaco, una libra de cerezas o un vaso de vino y encontrará en él un ser comunicativo, simpático, benevolente, enfín,un buen camarada.”
(…) “Por ahora, se encuentran muy bien, excepto el pobre Sénaqué, que, me temo,agregará por su muerte una incisión suplementaria a los brazos ya tan tajados de la pobre Michaela (…)
(…) “Apellidos y nombres, Senaqué; País, Indio; Edad, presumiblemente cincuenta seis a cincuenta y siete años; Profesión, favorito del jefe de la tribu, médico: Lugar de nacimiento, tribu de los Charrúas; Soltero. Entrado el 23 de julio de mañana. Muerto el 26 de julio a las siete de la tarde. Permaneció cuatro días en la Maison Royale de Santé.”
“SENAQUÉ, fallecido a los 56 años, Allèe d’Antin Nº 19, el 26 de Julio de 1833”
“No fue tan sólo por especulación pero también por humanidad, que los Charrúas han sido traídos a Francia con su propio consentimiento. Estarían muertos de dolor y de miseria en los calabozos de Montevideo, donde eran cautivos. Ningún cuidado le fue negado a Senaqué por sus conductores antes de su muerte, y su cadáver no ha sido vendido, pero dado por ellos al Cabinet de Anatomía del Jardin del Rey. Los Charrúas sobrevivientes están muy felices de las visitas que reciben, sobre todo cuando son visitas de damas. Su domicilio es de ahora en adelante rue de la Chaussée d’Antin, n° 27, en un local más digno de ellos y de las personas honorables que quieran pedirles audiencia.”
“(…) a su llegada a Francia, los cedió, al parecer, a un especulador de las manos del cual pasaron a un zoológico ambulante.” El 20 de setiembre de 1833, a las 9 de la noche, Micaela Guyunusa dio a luz una niña nacida a término y por lo tanto concebida antes de su partida de América. El doctor Stanislas Tanchou, enviado por el Sr. Flourens días más tarde para atender a la pequeña por una retención de orina redactó un artículo sobre ese parto al que no asistió, recogiendo al parecer sus datos con la partera, la Sra Lesueur. El relato del Dr. Tanchou que fue publicado en el diario La Gazette des Hôpitaux, contiene la descripción siguiente:
“(…) Así como Guyunusa, que ya había tenido un niño en su país, a orillas del Río Negro (América del Sur), sintió unos dolores de alumbramiento, procuró estar sola,tomó una cuerda que anudó en forma de ocho a la doble empuñadura de una de las puertas del apartamento revestido de lambriz, en el suelo del cual están acostados sobre unas pieles y un fino jergón46. Guyunusa deja esa cuerda lo suficientemente larga como para que tirando se encuentre casi de cuclillas en el suelo. Cuando los dolores se volvieron más fuertes, su marido, Vacuabé (sic), vino a sentarse como se sientan los Sastres bajo ella, de manera a que la paciente pueda ella misma sentarse sobre sus rodillas. Cuando los dolores se volvían fuertes, Vacuabé (sic) se mantenía tranquilo, pero cuando el dolor era débil, o que había pasado, alzaba a su mujer con sus rodillas y la empujaba hacia arriba; al rato la soltaba para producir una sacudida, como se haría para amontonar grano en una bolsa. El parto se hizo en tres horas casi sin dolor; un rato después, esta mujer se levantó, fué hasta la chimenea para calentarse y sentándose en el piso, el mismo día, como los días anteriores y desde entonces Guyunusa se aseó como de costumbre, se bañó la cabeza en un balde de agua fría; tuvo un poco de fiebre de leche, para lo que no se detuvo un instante, comiendo carne casi cruda cuando tenía hambre, como a su costumbre. La pequeña Charrúa nació a término, su cabeza es muy chiquita, sus cabellos son de un negro azabache y muy espesos; su piel es de color tierra de Siena oscura, como la de sus padres. Su madre no pudiendo alimentarla, se dijo, se le dieron alimentos que ocasionaron una inflamación de la barriga, y después del cuello de la vejiga; de ahí la retención de orina por la cual la he examinado. Exigí que esta niña sea alimentada por su madre; hoy se encuentra bien.” “A la tercera contracción, dió a luz. Tenía las piernas cruzadas, manteniéndose suspendida una correa fijada a la altura de su pecho. Ella misma hizo sus preparativos en el día sintiendo que iba a dar a luz. En el suelo, una piel doblada en cuatro le servía para descansar después del dolor, y cuando dejaba la correa. Cuando un dolor volvía, Tacuabé parado trás ella la apretaba en sus brazos y con sus manos le apretaba fuertemente la barriga que deprimía y la hacía saltar de tiempo a otro como para obligar al feto a bajar por su peso. Ella se quejaba sólo durante los dolores y rehusó definitivamente acostarse, habiendo anteriormente dado a luz siguiendo la costumbre de su país. En el momento del pasaje, la cabeza habiendo salido, el niño gritó50. Tacuabé rogó a la Sra Lesueur de asistir a Michaëla cuyas tuberosidades isquiáles tocaban casi los talones, por lo que era imposible entonces recepcionar al niño por delante.”
(…) “En el momento de la expulsión de la placenta que ocurrió inmediatamente después del parto, se quejó de nuevo, retomó su actitud como para dar a luz. Tacuabé la tomó y la apretó aún más fuerte que la primera vez. La Sra Lesueur habiendo palpado reconoció que la implantación estaba arriba y atrás y por leves tracciones reconoció también que ella (la placenta) todavía se pegaba, después de la segunda contracción, se separó. Su mujer no presentaba nada en particular, su volúmen no excedía al de (una placenta de) 5 a 6 meses; era perfectamente circular y de una perfecta integridad.El cordón era muy voluminoso, más grueso que el pulgar, corto.” (…)”
Tacuabé sin que se lo pidiera, trajo un cuchillo para cortar el cordón, una palangana y agua que había entibiado para lavar al niño.” (…) “Ayer de tarde, estaba abatida, la piel habitual, los senos son muy poco obstruídos51 de un gran volúmen, puntiagudos; el pezón no es distinto y moderadamente obstruído; tiene muy poca leche. El niño no puede mamar a no ser con dificultad a causa de la forma del seno, y de la escasez de leche; se le alimenta; tiene la barriga cinchada desde el parto.” (…)
“El (Tacuabé)ama los niños y acaricia mi hija”
(…) “Michaela, muy bonita para una Charrúa, no tiene otra particularidad física de notar que los rasgos de tatuaje que lleva sobre la frente y sobre la nariz. El tatuaje, tan común en los mares del sur y los Americanos del Norte es poco esparcido en el sur.Entre los Charrúas, es sólo practicado en las mujeres y se limita a tres rayas azulesque se extienden verticalmente sobre la frente, desde la raíz del cabello hasta la punta de la nariz. (…)
El vestido de los Charrúas es extremadamente simple. Está compuesto para los hombres como para las mujeres: 1° de una suerte de gran abrigo cuadrado,en forma de casulla de cura, cayendo casi hasta tierra, y que se agarra sobre el pecho por sus dos ángulos superiores. Está hecho de pieles de animales salvajes, y cosido con hilos de intestinos de avestruz; el pelo está para el lado interior; el lado exterior está pintado de figuras irregulares de diversos colores; 2° de una clase de falda de cuero o paño tosco, llamado chilipa, mantenido alrededor de los riñones por un cinturón, y que baja hasta el tobillo.”
“(…) Desde una hora por lo menos, las cuatro academias prolongan su boba curiosidad, cuando, torturado por su agobiante inquisición, uno de los tres Charrúas, el Vaïmaca Péru, hizo escuchar unos sonidos guturales, que debían ser una interrogación por su mirada muy decidida, al exhalarlos. Los doce académicos debieron estimarse felices de apreciar la organización vocal de los Charrúas, y fué probablemente entonces que el Sr Virey, que había dejado de comer, imaginó que el arco cigomático era más extendido en ellos que en los Europeos. Para mí, se trataba de saber qué idioma había hablado el Charrúa; aguardaba esta aclaración; porque estaba seguro que los académicos lo habían perfectamente entendido y distinguido de los otros idiomas americanos. Pero cuando de nuevo, el Charrúa repitió su frase interrogativa, tuve que concluir que si los académicos poseían el conocimiento del idioma de los Charrúas, no sabían que responderle. Súbitamente, un intruso, colado como yo fraudulentamente entre los sabios, me dijo, pero bajito, por miedo de comprometerse: el Charrúa habló en español, ¿lo sabe? Dijo puramente, muy gramaticalmente: Que veulent ces hommes?¿Qué quieren esos hombres? (…)
Pero una niña ha nacido. Guyunusa ha dado a luz a una niña, una pequeña charrúa que será francesa, parisina, de la comunión del abato Chatel, y morocha picante58. Tacuabé, joven guerrero, al que ven de pié (…) estudia el idioma francés y cuando lo domine al mismo punto que el Sr. Virey, en poco tiempo, hará su informe sobre las cuatro academias y los doce académicos. Será curioso; le dedicaremos un artículo.”
El cacique Vaimaca Perú murió una semana antes del nacimiento de la niñita en París, el 13 de setiembre. Meses antes, el ya citado L.P. escribía sobre él:
“Su nombre es Vaimaca, pero los Charrúas le llaman siempre Péru” (…) “Péru habla con bastante soltura el español y entiende también el portugués” (…) “Deseó, por ejemplo, ver al rey de los Franceses. Es el único hombre que su orgullo de príncipe no juzga indigno de ser visto por él en tierra extranjera. Se propone pedirle una nave y unos cien hombres para volver a América, cortarle la cabeza al presidente Rivera, y vengar a su nación.”
“Vaimaca Peru. Jefe tribu india, (América), fallecido a los 55 años,(calle de la) Chaussée d’Antin n° 27, el 13 de setiembre de 1833.
“El Sr Séguier en su doble calidad de académico y magistrado fue encargado de obtener de la administración, la reparación de los daños y perjuicios causados a los desgraciados Charrúas (…) de los cuales no estaban excluídos los latigazos y esto ante el más mínimo pretexto” .
Acta de Defunción de Micaela Guyunusa.
“El veinte y trés de Julio de mil ocho ciento treinta y cuatro a las once horas de la mañana, ante nosotros intendente de Lyon han comparecido los señores Anthelme Nochet, de treinta y seis años y Etienne Tissot cincuenta y cinco años, empleados en el hospital de enfermos de esta ciudad, quienes han declarado que Micaëla Guyunusa, de veintiseis años, nacida cerca del río Uruguay (América Meridional) domiciliada en Cour des Archers, n° … esposa de … Tacuabé que estaba sin oficio, ha fallecido ayer de noche a las nueve. Lectura hecha de la presente acta a los declarantes, estos lo han firmado con nosotros.”
“Una de las mujeres Charrúas, de esos salvajes de America Meridional, traídos a Francia por un especulador que contaba con su presencia para imponer un rico tributo a la curiosidad pública, y que ha sido completamente engañado en cuanto a su anhelo,acaba de morir en el Hôtel-Dieu de Lyon, de una tísis pulmonar. Es la cuarta persona de esta familia que fallece desde su llegada a Francia. Deja un niño y un esposo que el alejamiento de su patria va a volver doblemente infelices.”
En los archivos de los Hospices Civils de Lyon se me informó que a la sala Montazet del Hôtel-Dieu, donde debió ser atendida Micaela Guyunusa, se le daba entrada sólo a quienes pagaban y muy caro, lo que indique quizás que alguien prestó ayuda a la pobre mujer ya agonizante a su llegada (falleció el mismo día). Por otra parte, cabe aquí destacar que la tuberculosis, enfermedad de la que fallece Micaela Guyunusa, era considerada una enfermedad hereditaria y no contagiosa en aquella época71. Por lo tanto no se habrían tomado las medidas necesarias para evitar el contagio.
Partida de defunción de la Hija de Guyunusa.
“El veintinueve de agosto de mil ocho cientos treinta y cuatro a las dos y cuarto de la tarde, ante nosotros intendente de Lyon han comparecido los Sres Jules Lalounet, de treinta y cinco años pintor y decorador, gran calle Mercière n° 56 y Jean Jacques Chardonnet, cuarenta años traiteur misma casa, quienes han declarado que Caroline Tacouabé, de un año, nativa de París, hija de Laurent doméstico, viviendo en la susodicha casa y de la difunta Michella Gununusa ha fallecido ayer de noche a las cuatro horas. Lectura hecha de la presente acta a los declarantes, han firmado con nosotros:Lalounet Chardonnet”
Don Fernando y Doña Isabel, por la gracia de Dios rey e reina de Castilla, de León, de Aragón, de Sicilia, de Granada, de Toledo, de Valencia, de Mallorca. . . duques de Atenas y Neopatria. Al Príncipe don Juan, nuestro hijo, e a los Infantes, prelados, duques, marqueses, condes. . . a los concejos, corregidores, alcaldes. . . de todas las ciudades, villas y lugares de nuestros reinos y señor lOS, y a las aljamas de los judíos y a todos los judíos y personas singulares, de cualquier edad que sean. . . salud y gracia. Sepades e saber debedes que porque Nos fuirnos informados que hay en nuestros reinos algunos malos cristianos que judaizaban de nuestra Sancta Fe Católica, de lo cual era mucha culpa la comunicación de los jud lOS con los cristianos, en las Cortes de Toledo de 1.480 mandamos apartar los judíos en todas las ciudades, villas y lugares de nuestros reinos, dándoles juderías y lugares apartados donde vivieran juntos en su pecado, pensando que se remorderían; e otrossi ovimos procurado que se ficiese Inquisición, . . por la que se han hallado muchos culpables, según es notorio. Y consta ser tanto el daño que se sigue 'a los cristianos de la comunicación con los judíos, los cuales se jactan de subvertir la fe católica, que los llevan a su dañada creencia. . . procurando de circuncidar a sus hijos, dándoles libros para escribir y leer las historias de su ley. . . persuadiéndoles de que guarden la ley de Moises, faciéndoles entender que no hay otra ley nin verdad sino aquella; lo cual todo consta por confesiones de los mismos judíos y de quienes han sido pervertidos, Lo cual ha redundado en oprobio de la Fe Católica. Por ende, Nos, en concejo e parescer de algunos prelados, e grandes e caballeros, e de otras personas de ciencia e de conciencia, aviendo avido sobrello mucha deliberación, acordamos de mandar salir a todos los judíos de nuestros reinos, que jamás tornen; e sobrello mandamos dar esta carta por la cual mandamos. . . que fasta el fin del mes de julio que viene salgan todos con sus fijos, de cualquier edad que sean, e non osen tornar. . . bajo pena de muerte. E mandamos que nadie de nuestros reinos sea osado de recebir, acoger o defender pública o secretamente a judío nin judía pasado el término de julio. . . so pena de confiscación de todos sus bienes. Y porque los judíos puedan actuar como más les convenga en este plazo, les ponemos bajo nuestra protección, para que puedan vender, enagenar o trocar sus bienes. Les autorizamos a sacar sus bienes por tierra y mar, en tanto non seya oro nin plata, nin moneda nin las otras cosas vedadas.
Otrossí mandamos a nuestros alcaldes, corregidores. . . que cumplan y hagan cumplir este nuestro mandamiento. Y porque nadie pueda alegar ignorancia mandamos que esta Carta sea pregonada por plazas e mercados. /
/ Dada en Granada, a treinta y uno de marzo de 1.492.
No se le puede pedir mucho a mi pobre Ronish. Está desafinado. Pero una gran amiga (¡Gracias NORISA!) me filmó cuando yo le hacía una demostración, sepan disculpar entonces las impefecciones...
Queridos amigos: Lo confieso. Esta nota es pura CATARSIS.
Durante este período he estado demasiado aletargada, como para haberme demorado en el DESCUBRIMIENTO DE LA TACTICA DE MI ENEMIGO INQUISIDOR!(Para quienes no recuerdan ese que dijo si no se va La Traviesa, nos vamos X,Y,Z).
Como todos saben ellos son "expertos en ciencia ficción", de modo tal que (supongo comprenden de algoritmos, digo, quiero suponer, porque don Asimov los comprendía y como son sus hijos, digo no se si me entienden o quieren serlo, en fin, ya saben)
Y yo, que estoy con la Recursividad a mil, je!
Es así que (para quienes ya saben) el caso es el siguiente:
Una técnica muy poderosa para el diseño de algoritmos es “Dividir para conquistar”. Los algoritmos de este tipo se caracterizan por estar diseñados siguiendo estrictamente las siguientes fases: • Dividir: Se divide el problema en partes más pequeñas. • Conquistar: Se resuelven recursivamente los problemas más chicos. • Combinar: Los problemas mas chicos de combinan para resolver el grande.( Los algoritmos que utilizan este principio son en la mayoría de los casos netamente recursivos).
Pues bien, El Enemigo primero aplicó DPC, y ya saben. X le dijo a Y que La Traviesa "no calificaba", luego como (Y,Z) tienen una correspondencia biunívica (dicho en criollo, parejilla feliz) no fue difícil de que Z con muy buen criterio estuviese de acuerdo con Y.
Tal es así que X lo logró MAGISTRALMENTE. Debo de reconocer que estuve lentita para comprender la Estrategia, pero una luz me iluminó el cerebelo cuando para mi total y absoluta incredulidad, el tema de la Logia no era tan soez de mi parte, lo cierto es que fue REAL! ( El Juramento de Fidelidad, que pueden apreciar de la mentada comisión de http://montevideofantastico.blogspot.com/ , sí mis queridos, por lo tanto obviamente una Traviesa no Jura Fidelidad, porque aboga a los principios de la infidelidad más infiel de los infiernos, ustedes comprenden).
Anna Donner Rybak (Por el gremio de las traviesas , que no son lo mismo que los Traviesos, eh?)
Segunda Parte.
¡Aha! ¡Así que toda esta pactomima era para juntar el VIL METAL! Diría una amiga que le gusta la palabra marketting, pero en este caso, bien aplicada, ¡PESIMA LA CAMPAÑA PUBLICITARIA!
¿ASÍ QUE ESTO IBA A SER UNA EXPERIENCIA O COMO DIJERON "UNA PROPUESTA DE GENTE "DIVERTIDA"?
¡FA! USTEDES ME SORPRENDEN DÍA A DÍA.
Igual no me sorprende de Magia 10510, pues siempre hace lo mismo, va, pone la carita, pero todo como MEDIO para un fin: MONEY!!!!
¡AHA! Bueno, no seré tan perversa,quizá alguna ovejita cacen para el "Tallercito", y sino, aprovecharán el tiempo para otra cosa, POLIDEUSES!
Así que, Magia 10510, vos sólo querías nutrirte de todos para tu tallercito?
CATARSIS PURA.
sorry, cada día me confirma más que no me equivoqué nada en todo lo que pensé de ustedes.
p.d. Ustedes son POLIDEUSES, Y MAGIA, no sea cosa que POLIDEUSES universalice el ustedes.
A mi, síganme dando letra para LHBA, que me fascina, es mi HIJO QUERIDO!
IMPORTANTE Anna Donner Fantásticos ***NO TIENE REALACION ALGUNA CON EL GRUPO FANTASTICO DE MONTEVIDEO*** (Cualquier asociación con dicho grupo es mera ficción). Todos los Cuentos Fantásticos de Anna Donner Rybak son SI Y SOLO SI DE SU AUTORIA EXCLUSIVA)
"Ah, pero tú sos judía?, Pero tú sos bien. Yo no tengo nada contra los judíos pero...". Esas personas no querían a los judíos.
Durante mi más tierna infancia me habían hecho preguntarme qué tendría de distinto con los otros, para luego como lógica consecuencia pasar a la pregunta Universal de qué tendría Un Judío de Distinto con Los Otros.
Yo había nacido en una familia atea y progresista, y daba por hecho que éramos iguales a los demás, y consideraba que estábamos integrados a la sociedad uruguaya.
Pero algo sucedía conmigo y con otros judíos; los Otros nos rotulaban. Yo no entendía, era una niña que no tenía nada en la sangre que indicara que yo era judía, además tampoco creía en Dios.
Fue entonces la Baba J. y la Tía K. se pusieron a llorar en ydishh, y me mostraron un álbum de fotos en blanco y sepia, de esas de principios del siglo XX, con los tatarabuelos, bisabuelos, fotos de familias numerosas. Iban pasando las fotos del álbum y el Tío I, me señaló una toma de tres niños pequeños, mellizos y un hermanito más grande, y me dijo: "A ellos los mataron los alemanes en el campo de concentración." Me explicó entonces que los alemanes no querían a los judíos.
Esa fue la Primera Revelación. Yo seguía sin entender qué era lo distinto que teníamos nosotros, porque éramos personas iguales a las otras, no corría sangre diferente por nuestro cuerpo, no teníamos olor feo, pero ya más grande leí declaraciones de que el olor de los judíos era insoportable, que estaba bien que les hubieran hecho un espacio especial en Varsovia, el Gueto, así no contagiarían ni sus piojos ni sus pestes a los nobles ciudadanos, así entonces ellos justificaron el hacinamiento, y el hambre. Estábamos cada vez más raquíticos contra el paredón, navegando bajo las cloacas, a cambio de comida para los que quedaban dentro.
Entonces le pregunté a la Baba G. , y me contó que mi papá y ella salieron de Europa en el último barco del año 1939, y que de Viena se tuvieron que escapar a Italia, y que su hermana F. y su familiaa de milagro habían sobrevivido, luego de estar en un tren y sibur la insección de la Gestapo. F. quedó helada de pánico, sus hijas pequeñas, tiesas como estatuas, y por aquello de que quizá si exista algún tipo de Dios o fuerza del Destino, ellas no fueron detenidas en aquel tren, y que mi papá y la Baba G. pudieron tomar el barco y por eso es que yo ahora estoy acá, escribiendo.
Entonces, qué era eso? Yo sabía que había personas que creían en un Dios y otras que no creíamos en ninguno. Yo, no creía en ningún Dios pero era judía. Pero los Otros me decían que mi "religión" era judía. Pero es que yo no tenía una religión!, aún así, para ellos yo era judía, fue entonces que comencé a sentir un apego a ese ser.judío, aunque no entendía muy bien de qué se trataba esa definición para mi, un judío sin Dios. Y también comencé a sentir desprecio por los judíos que no aceptaban como par a un no.judío. Y entonces me decía: Con razón no nos quieren! Cómo nos van a querer si nosotros tampoco los queremos a ellos?
Entonces, fui entendiendo que habíamos distintos tios de seres judíos, algunos, creían en Dios, otros, no, pero lo más curioso del asunto era que muchos de los que no creían en Dios eran quienes decían no querer para su descendencia un par no.judío. Y por qué hacían eso? Nosotros no estábamos allá arriba como para despreciar a los otros. Bueno, eso es lo que yo pienso. Pero otros judíos no. Es coherente, entonces, que los no.judíos quizá se vean tentados a pensar que todos los judíos somos como esos judíos que no quieren a los no.judíos. No todos los judíos éramos iguales.
Seguí investigando acerca de ese dilema existencial que me aquejaba sobremanera, y entonces entendí que había una comunión entre mis antepasados y yo. Nos gustaban las canciones en Ydishh, comíamos fainkojun y gefilt.de.fish, y mi mamá me había contado que eso hacían mis bisabuelos, y mis tatarabuelos y todos mis ancestros. Entonces yo vengo del reino del Ydishh y del gefilt.de.fish!-pensaba.
Mi mamá también me explicó que no enterrábamos con la cruz, sino con la estrella de seis puntas, y me explicó que los velorios los hacíamos con el cajón cerrado, y que además una vez enterrado, nunca más se sacaba de allí, pero que los católicos, a los cinco años, reducían el cuerpo y hacían los velorios con el cajón abierto. Y mi mamá me explicó también que para los católicos la Biblia tenía un Antiguo y un Nuevo Testamento, pero que para nosotros, sólo valía el Antiguo Testamento.
Mi mamá me explicó que Jesucristo era un judío que había nacido en Israel, y que había muerto en una cruz a los treinta y tres años, que por eso se contaban los años desde el nacimiento de Jesucristo. Pero nosotros, contábamos el tiemo de mucho antes, mientras los católicos iban por el 19.. nosotros íbamos por el 57..
Hasta entonces iba asimilando esas diferencias, pero igual seguía sin entender por qué solo por eso no nos querían. Era cuestión de que el tiempo para los católicos tenía una dimensión distinta que para los judíos, bueno, creíamos en distintos Dioses, pero por eso no nos querían?
Más tarde aún me enteré que así como los católicos eran muy religiosos y rezaban, había judíos que también rezaban, iban al schill, y algunos, hassta se dejaban la barba muy larga. Y esos judíos solo podían tener relaciones sexuales con su pareja a través del agujero de una sábana, no podían cuidarse para no tener hijos, las mujeres tenían que vestir pollera, y pañuelo en la cabeza. Entonces me dije: "Quizá no nos quieran por esto".
Pero igual, no era suficiente, no molestábamos a nadie, al fin y al cabo los religiosos se casaban entre ellos y listo.
Pero algunas cosas comenzaban a disgustarme de esos religiosos. Eran machistas, y las mujeres estaban sometidas. Y eso no lo entendía, porque mi mamá nunca me enseñó que yo debiese ser la sombra de un hombre, ni que debía servirlo, ni que debía de aprender a cocinar antes que estudiar. Nada de eso me había enseñado mi mamá porque la Baba J. a ella le había enseñado que lo más importante era estudiar, y que cuando tuviera que cocinar, ella se las iba a arreglar.
Mi "panorama" de "Lo Judío" lejos de simplificarse, se iba complicando cada día más. Y eso me daba energías para seguir mis investigaciones, porque quería llegar al fin último de entender porqué mi amiga X. no me había dado la tarjetita de su comunión.
Un buen día me enteré que mi mamá no nos había mandado a C. ni a mi a ninguna "tnua", porque tenía miedo que cuando creciéramos nos fuéramos a vivir a Israel, e Israel era un país muy lejano y además estaba en Guerra.
No me gustó que mi mamá decidiera eso por mi, me hubiera gustado ir a la "tnua", y después decidir por mi misma que haría.
Lo único que me iba quedando claro era que yo era judía porque descendía de judíos, y esos judíos eran judíos porque comían gefilt.de.fish y cantaban en Ydish. Pero yo era una judía con agujero: Dos. Era una judía sin Dios. Y si era una judía sin Dios porqué me hablaban de lo judío como una religión? No, se trataba de algo mucho más trascendental y complejo. Yo me sentía muy judía, me solidarizaba con mis abuelos, en contra de los que nos persiguieron y mataron a los nuestros, y en casa de mi abuela comíamos fainkojun y yo era judía por eso. Mi mamá me explicó que había un país llamado Israel, pero no me dijo qué pasaba allí, ni por qué muchos judíos querían vivir allá. Israel, a los ojos de mi mamá era una nebulosa, sucede que ella era formada en Zhitlovsky, y como los judíos del Zhitlovsky no son sionistas, entonces, Israel no existía. Ni para bien, ni para mal.
Luego entendí por qué hay judíos de todas las nacionalidades, con pieles claras, y pieles oscuras, judíos nórdicos y judíos negros, y eso es porque cuando los Romanos nos expulsaron de Israel, luego de la caída del Segundo Templo, se desperdigaron por todo el mundo. Algunos en tierras cálidas, otros en tierras gélidas, el pueblo judío quedó disperso por todas partes, había judíos que eran iraníes, y que luego de la caída del Sha, se tuvieron que escapar de Irán a través de las montañas, y así llegaron a Israel.
Los judíos se dividieron en Sefaradim (los que fueron a España, Sefarad), y Azquenazim (los que fueron a Rusia y a Europa Oriental). Es que éramos judíos porque éramos en ese entonces hebreos, hablábamos hebreo, el idioma del antiguo Israel.
Pero ese hebreo se fue modificando. En Europa surgió el Idish, una mezcla de alemán, inglés y letras hebreas. En Sefarad los judíos hablaban ladino, un dialecto de español y latín. Entonces el hebreo pasó a la historia, y los judíos no tenían más una Tierra. En todos los lugares que estaban eran considerados parias o extranjeros. En Europa venían los cosacos y violaban a nuestras mujeres (es por eso que habemos judías de piel clara y ojos celestes como yo). Porque los judíos que se fueron de Israel cuando se cayó el Segundo Templo eran igual a los árabes, de ojos marrones y piel oscura. Para los cosacos era un espectáculo circense quemar nuestras aldeas, es por eso que tenemos canciones en Ydishh que hablan del fuego, esa actividad se llamaba progrom. Además, se burlaban de las barbas largas y de los rizos, de nuestros oficios; éramos bufones. Todo eso ocurría porque ya no teníamos más una Tierra en donde nos dejaran ser lo que quisiéramos ser.
Pero luego me enteré de lo peor: yo creía que no había nada más diabólico que los campos de concentración, Hitler, Menguele, y las cámaras de gas.
Pero me faltaba una parte de la historia. Los reyes católicos Fernando e Isabel expulsaron a todos los judíos de Sefarad, hicieron un edicto que tenía un plazo, y una vez que venciera el mismo, investigarían, y si descubrían a alguien pronunciando la palabra "Israel", sería quemado. Era tan fuerte que no lo podía creer. Fue entonces que me enteré de la Inquisición y de la Iglesia, y que para ellos, los católicos, nosotros, los judíos éramos el enemigo. Nos denominaban "los pérfidos judíos", y a los que se convertían al cristianismo, los llamaban "marranos" o Cristianos Nuevos.
Un judío debía olvidarse para siempre de Israel, de las festividades, de su calendario, o de lo contrario era quemado vivo. Pero muchos no pudieron desprenderse de aquellas tradiciones, y celebraban en secreto el Shabat, y es a ellos quienes el largo brazo del Santo Oficio persiguió a los confines de España, Portugal, y en América en Argentina y El Perú. Y es entonces, que los Cristianos Nuevos (los marranos) comienzan a despreciar sus orígenes, y se convirtieron aún en más antisemitas que los católicos.
A fines del siglo XIX, y antes de Hitler, muchos judíos estaban hartos de ser despreciados, perseguidos y torturados. Es entonces que desde pueblos perdidos de Rusia , pasando por Europa Oriental, comienza la primer Aliá (Retorno). Querían simplemente unm lugar en donde pudieran vivir en paz. Encontraron en Palestina terrenos fangosos, y algunas aldeas polvorientas, a las cuales el desarrollo no había llegado y vivían casi como en la Edad Media.
Entonces, el desafío fue transformar los pantanos en tierras cultivables, para ello trabajaron noche y día, todo solamente por el derecho a vivir en un lugar en donde no se rieran de ellos por ser judíos.
Y así comienza a dibujarse la historia de Israel Moderno. Si fuera por los judíos y los palestinos, creo que jamás se hubiese llegado al conflicto que hoy por hoy persiste en la región. Pero Palestina era una Colonia Inglesa, y a los ingleses no les hacía ninguna gracia la llegadaa del progreso, porque ellos tenían sometidos a los palestinos en cuatro aldeas polvorientas.
El Mundo Arabe se alió con Inglaterra, por ello los barcos que venían de Creta no podían desembarcar en las costas de Haifa, pensar que eran Sobrevivientes del Holocausto, y algunos murieron en alta mar, por las infecciones o en los campos de Creta (Karaolos).
Es que el conflicto es una Lucha de Poderes entre quienes nada les importa ni de los palestinos ni de los judíos. Y es por ello que ponen a Unos en Contra de los Otros.
Sobre mí
Anna Donner Rybak nace en Montevideo el 21 de setiembre de 1966.Desde 1989 hasta 1996 es docente en UTU de Programación de Sistemas y de Lógica.En 1993 se recibe de Analista de Sistemas.Escribe desde 2000, diversos géneros: Cuentos históricos, cuentos de humor, Columnas de actualidad, Ensayos, Poesía y fantástico.