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Consultas psicológicas

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Psic. Viviana Vaisenberg. Terapeuta Cognitiva Comportamental

Sobre el autor

Psicóloga. Terapeuta Cognitivo Comportamental Me especializo en DEPRESIÓN, TRANSTORNOS DE ANSIEDAD. Aprender a manejar estas crisis, mejora la Calidad de Vida de la persona. CRISIS DE PAREJA, estar solo o en pareja y ORIENTACIÓN A PADRES. Tengo dos formas de trabajar. Terapia PRESENCIAL osea cara a cara, que es la forma tradcional y TERAPIA ONLINE.

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Emigrantes

11.Jul.2013

Volver no tiene sentido
Tampoco vivir allí
El que se fue no es tan vivo
El que se fue no es tan gil
Por eso si alguien se borra
Qué le podemos decir
No te olvides de nosotros
Y que seas muy feliz….

Jaime Ross


La emigración ha acompañado a la humanidad a lo largo de toda su historia.
Emigrar es para muchos buscar un futuro mejor: ¿económico?, ¿académico?, ¿encontrar el Amor? ¿probar suerte?
Estas son algunas de las causas por las que muchas personas deciden emigrar.
La idea es que si decides hacerlo lo hagas mirando hacia adelante, viendo un futuro esperanzador. El éxito está vinculado a lo que tu profetices, veas delante de ti.

Por ejemplo, se presenta una propuesta laboral, eso generara un cambio a nivel familiar, de status, económico y más.
Se producirá un cambio geográfico, donde a veces no es tan fácil regresar tan seguido como te gustaría. Se dejan muchas cosas: amigos, familia, la tierra, los olores, los lugares. Por esas cosas tendrás que hacer un duelo.

El día de partir algunos objetos, recuerdos viajan contigo como por ejemplo fotos, u otros cosas que sirvan para evocar tus recuerdos, o se dejan por miedo a recordar y flaquear en la decisión.

Emigrar no es solo cambiar de país, implica cambios a nivel psicológico, de  quienes emigran, de los que se quedan  y de todo el entorno.

Se vive desde ambos lugares un duelo. Un duelo que si bien es normal, el transitarlo implica dolor, aceptación y poder encontrar la paz interior al final.

Si bien es cierto que gracias a los grandes avances tecnológicos, podemos hablar todos los días ( dependiendo de la diferencia horaria), también es cierto que no se puede tocar o estar.
¿Compartir? Tampoco, yo dirá que puedes contar, transmitir, pero a ese cumpleaños, asado, paseo, no podrás asistir.
Es muy importante tener en cuenta estas cosas, para pre-ocuparse de las mismas.

A veces hay que aprender un nuevo idioma, respetar una nueva cultura, normas diferentes.
No es lo mismo si la persona viaja sola que con su familia. Si ya tiene casa o no. Si viaja con hijos o si estos quedan acá.
Muchas veces las familias quedan desintegradas, y la persona que llega sola. Busca nuevas redes de apoyo. En un principio su idea es juntar el dinero para traer a su familia y  en ese camino solitario, decide transitarlo con alguien y se forma un nuevo grupo familiar. ¿Qué se hace con la familia que quedo allá? ¿Qué se hace con la nueva familia que se formó?

A veces es toda la familia que emigra. Es un cambio muy grande, donde les aconsejo tomar en cuenta a los niños. Contarle a donde se va a ir, usar material como ser un mapa, explicar a los niños, el para que viajamos.
Sinceridad pero sin cargar a los chicos ya que estos se preocupan mucho por el bien estar de los padres.
Una cosa es decir ¨papa consiguió trabajo en el exterior y vamos a tener la posibilidad de vivir en otro país, hacer nuevos amigos….¨ reconocer si, que los amigos de acá, se quedan acá, y otra cosa es dramatizar ¨tenemos que irnos, porque si noacá nos morimos de hambre¨.
Una cosa es decir la verdad y otra es atemorizar. Compartan con sus hijo sí, pueden reconocer que también les entristece ¨dejar a los abuelos¨y que también se alegran de la posibilidad de viajar y conocer otras culturas, países, etc.

Los emigrantes viven lo que llamamos ¨Duelo¨, sumado al estrés psico-social de adaptarse a este nuevo medio.

Muchas veces se les aconseja acudir a un profesional de la salud a quienes emigraron y/o los que se quedaron. No es lo mismo estar triste por separase de los amigos, entrono, cambiar en muchos sentidos, que caer en un estado depresivo, donde las cosas ya no tienen sentido.

A veces no vemos la depresión, pero si los ataques de pánico, el no querer salir de la casa por miedo a desmayarse, dolores en el pecho, cefaleas.
En otros casos las personas piensan en el país que se dejó pero de una forma totalmente idealizada. Se sabe  que no hay países perfectos, pero se empieza a creer, que lo que se dejo era único.
Psicológicamente hablando se produce un filtraje de información. Ósea que la persona filtrara la información y solo ve en estos casos lo negativo, de donde está.
La idea no es negar que sí que hay perdidas cuando uno emigra, hay cambios, pero que también hay ganancias, no solo a nivel económico, que para muchos puede ser un gran aliciente, sino que también puede ser visto como una oportunidad para conocer, cambiar, probar, aprender un nuevo idioma, viajar y mucho más.
Aclaremos que hay personas que se integran muy bien al país, de acogida ya sea  por distintos factores.

Los duelos son inevitables hay que transitarlos, lo que se puede hacer es acompañar ese tránsito.
Te aconsejo, tratar de tener nuevamente una rutina ya que están te darán estabilidad y seguridad.
Busca personas que hablen tu idioma o tengan tu cultura, y también intenta integrarte a la nueva sociedad, sin renegar ni sobre valorar tu propia cultura.

Se le llama Síndrome de Ulises a aquellas personas que al emigrar comienzan a tener un estrés crónico, lo cual es bastante limitante, y muchas veces el mismo determina que se despierten patologías que estaban latentes.
La idea es saber estas cosas, para que estén preparados para afrontar las situaciones, sabiendo que el duelo es parte de la vida, y que si bien hay ganancia, hay una perdida, afectiva por lo que se dejó atrás y la manera de sobreponerse: es aceptarlo, vivirlo.

Pregúntate¿dequé manera crees que es posible manejar esta situación nueva?
Para cada persona o núcleo familiar, habrá una salida, diferente. Desde anotarse en un club, ir a un curso para aprender el idioma y un sin número de estrategias como lo que llamamos “ataque a la vergüenza” que implica animarse a hablar aunque se rían de tu mala pronunciación y ríe tútambién .Reír es una de las mejores terapias

Buscar un trabajo, mientras la pareja trabaja.
Sentirse útil, sobre todo, y saber que el futuro está en sus manos y confiar en el.
Además de confiar, actúe en consecuencia, tomar conciencia es responsabilidadde uno mismo. Probar, tener la experiencia y tomar de esta lo positivo para repetirlo, y  lo negativo para buscar otro camino. Volverse resiliente.
Si lo intentas: lo logras. Aunque siempre seas extranjero, tanto en el exterior como a veces al volver a tu tierra.


Psic. Viviana Vaisenberg
Terapeuta Cognitiva Comportamental
Pag web: www.terapiaonline.com.uy