Montevideo PortalColumnistas
Así lo veo yo

Así lo veo yo

Columna de Ana Jerozolimski

Sobre el autor

Uruguaya, radicada en Jerusalem desde 1979. Redactora Responsable de "Semanario Hebreo".

Más columnistas

imagen del contenido Escribe Gerardo Sotelo
imagen del contenido Escribe Ana Jerozolimski
“Al ver las imágenes de Juan Guaidó regresando a su país (. . . ) lloré de emoción.
imagen del contenido Escribe Esteban Valenti
La diferencia en los indicadores de la violencia entre los barrios de la costa y del norte y el oeste de Montevideo corresponden prácticamente a dos países diferentes.
imagen del contenido Escribe Pablo Mieres

RECORDANDO A LILY LERENA DE SEREGNI

22.Ago.2012

 

EN MEMORIA DE  UNA GRAN MUJER

 

Hace pocos días, Uruguay perdió a una gran mujer que amaba la vida: Lily Lerena de Seregni.

No alcanzamos a conocerla personalmente, pero tuvimos el honor de haber podido conversar con ella en algunas oportunidades, largo y tendido, telefónicamente. Era un contacto que llenaba el alma, un ejemplo.

En su memoria, reproducimos hoy aquí una de esas entrevistas, que le realizamos en el año 2008.

 

 

 

 “NUNCA PUDE HACERME A LA IDEA DE QUE SEREGNI NO VA A VOLVER MAS”.

 

Del álbum familiar: Lily, con Seregni, compartiendo felicidad.

Esta entrevista la realizamos cuando faltaba poco para el cuarto aniversario del fallecimiento del General Liber Seregni, una de las figuras más respetadas de la vida política nacional. Tras años en el Partido Colorado, fue de los fundadores del Frente Amplio en 1971, llegando a ser su Presidente y líder máximo.

Su compañera de toda la vida, Lily, nos dio el honor de compartir con nosotros sus recuerdos y sentimientos sobre el esposo al que sigue extrañando, pero también sobre su liderazgo y su impronta en la vida nacional, además de hermosos recuerdos familiares. Seregni y Lily tuvieron dos hijas: Bethel  y Giselle.

Gracias a su buena voluntad, conocimos una mujer de energía contagiosa, que jamás se aburre porque todo le interesa. La ceguera no le impide seguir aprendiendo y estar al tanto de todo.

Al parecer, es cierto que junto a un gran hombre, debe haber una gran mujer.

 

 

 

P: Lily, presento esta entrevista como una conversación con la compañera de Seregni desde siempre, pero usted no es sólo eso....

R: Yo me siento muy orgullosa de haber sido la compañera de Seregni, pero desde que nací , desde que iba a la escuela hasta ahora, me he sentido Lily Lerena. He compartido con Seregni muchos años de nuestra vida-64 años-, hemos tenido una vida normal, de todo matrimonio  adulto que ha sabido enfrentar todas las dificultades juntos y también las cosas muy buenas. Pero como persona, me considero una ciudadana común.Sigo siendo la misma Lily de cuando iba a la escuela, de cuando tenía 17 años e iba a los bailes, de cuando empecé a trabajar, a conocer un ambiente diferente al que había sido el mío hasta esa edad.

P: Con su propio enfoque de las cosas, no simplemente a la sombra de la pareja que tenía..

R: Claro. Mis hijas dicen que tengo una personalidad fuerte porque vivo hoy pero estoy pensando en mañana.

P: Eso es muy lindo , especialmente siendo una persona mayor..

R: Es verdad.Y mis hijas me dicen “ay mamá, quién sabe qué pasa mañana”, pero yo digo que siempre es bueno hacer un proyecto lindo y también precaverse sobre la posibilidad de que se presente algo dificultoso. A mi eso no me amarga, creo que es una forma de vivir, es mi forma de ser, mi naturaleza.

P: Eso la habrá ayudado con todos los desafíos que tuvo que enfrentar..

R: Muchísimo.Quizás tuve demasiado los pies en la tierra  y hubiera sido bueno también estar un poco flotando en las nubes..En realidad he combinado ambas cosas,  pero no he podido despegarme completamente de la tierra.

 

P: ¿Y cómo era su esposo en ese tema?

R: Era igual que yo. El todo lo hacía hoy-pero incluso en el razonamiento político-pero diciendo que hay que pensar en 20 años más adelante, aunque primero, pensar en mañana.

 

P: ¿Cómo lo conoció a Seregni?

R: En un baile. Lo conocí a eso de los 18 años. Una amiga que vivía en Durazno y que era novia de un militar, me invitó a pasar  unos días en su casa. Fuimos a un baile en el Club Uruguay en Durazno  y ahí me presentaron a Seregni, que estaba ahí por casualidad.El estaba prestando servicios en Flores pero ese día  no tenía necesidad de estar en el cuartel y fue con un amigo al baile, así que nos conocimos. Nos escribimos como dos años como amigos, nos veíamos de vez en cuando si él venía a Montevideo. Creo que él tenía su novia...Yo también tenía algún dragoncito..

 

P: Y yo que le iba a preguntar si fue amor a primera vista, pero ahora entiendo que ambos estaban ocupados...

R: Es verdad. Fue  una simpatía muy grande, pero los dos estábamos en otra cosa.

P: ¿Pero no bailaron?

R: Si, naturalmente, pero como amigos...

P: ¿Y qué encendió luego el amor?

R: ¿El amor? Creo que vino despacito, de a poquito, no fue un deslumbramiento, ni un flechazo.

P:Dicen que así es más firme, más seguro....

R: (risas) Creo que si..

 

P: ¿Y podría explicar hoy por qué se enamoró de él?

R: Pensábamos igual, nos gustaban las mismas lecturas, teníamos una enorme coincidencia en montones de cosas, entonces era muy fácil la amistad. Después, cuando él vino a Montevideo y dejaron de ser cartas para ser encuentros, la cosa cambió.

P: Y ahí, supongo, él ya no tenía novia....

R: (risa) Ahí dejamos de ser amigos....

P: Pero es una linda base, que el trasfondo fue una profunda amistad.

R: Sin duda. Yo creo que esa fue la base de nuestro largo matrimonio, una mezcla de amor, amistad, hermanados en montones de cosas,. Creo que fue por la manera de ser de él y la mia.

P: Una vida juntos...

R: 64 años..En realidad tuvimos muchas separaciones por cuestiones de trabajo. Al poco tiempo de estar casados, Seregni fue nombrado para la comisión que debía volver a rectificar los límites con Brasil. Cada 45 días él venía casa por ocho o diez días. Todo fue al extremo que mis hijas, que se llevan 18 meses, cuando llegaba ese hombre –y él las conquistaba, las mimaba, les hacía cuentos- ellas quedaban contentísimas con “ese señor” que venía, el papá. Y luego pasaba más un mes hasta que volvía a venir...Empezó a ser realmente el “papá”, cuando tenían ya como cuatro años, la mayor de ellas.

Fue un padre excelente. Les fabricaba juguetes, les ayudaba con cosas que aprendían en la escuela, hizo algo con un cartón para enseñarles la hora..Una vez tenía que explicarles qué era un ballet y con cartón y figuritas les hizo un escenario..Se sentaba  a leerles cuentos de Monteiro Lobato antes de que se durmieran. Fue una ternura..

 

P: Suena así por su descripción Lily, realmente..

R: Como no teníamos dinero para hacerles grandes regalos en Navidad o Reyes, por ejemplo, como se acostumbra,  mis hijas siempre se acostumbraron a las cosas más chicas, de poco precio. Me acuerdo por ejemplo que en una época la nafta venía en dos latas dentro de un cajón, porque no había distribuidores como hay ahora. Ese cajón él lo convirtió en casa de muñecas. Lo dividió en cuatro: en un lado era la cocinita, en otro la sala, en otro el cuartito de las muñecas...todo chiquito, pero mis hijas eran tan felices....

 

SIN DESCANSO

P: Lily, con todas estas cosas lindas que usted describe, no puedo menos que preguntarle si cuando ya estaba enamorada de Seregni o inclusive ya de casada, usted captó que tiene al lado no sólo a un buen esposo y buen padre de sus hijas, sino también a un líder...

R: No, eso fue un proceso.  El era un hombre muy interesado por la política toda la vida. Nuestra biblioteca era inmensa, de todo lo que te puedas imaginar, historia, literatura, de todo..

P: Y usted también lee mucho , también ahora, aunque no ve, en Braille..

R:Si, siempre hay algo que leer y aprender. Yo te digo que si a mi una mujer me dice que está aburrida , qué largos le son los días,la mando al médico, porque a mi, no me alcanzará la vida para todo lo que quiero hacer. Y también con la lectura... porque yo ya voy hasta por novelas policiales, por Agatha Christie...(risa)

 

P: Es bueno ese afán de aprender siempre...

R: Claro que sí. Tengo mucho interés siempre, en todo, también en la vida política, por todo lo que me rodea, como si tuviera 30 años.

P: A veces hay jóvenes que no tienen ese espíritu..

R: Te digo Ana que a veces me olvido de los años que tengo. Recuerdo que después que se casaron mis hijas y Seregni estaba tan ocupado en la política, me dije que voy a hacer algo que siempre me gustó. Yo siempre pinté acá en casa, sin ninguna guía, sin ningún profesor, como forma de entretenerme. Hace unos diez años empecé a ir a clases de pintura y las cuatro compañeras que tenía eran judías. Seguimos teniendo amistad con ellas. Y fue el profesor de pintura el que se dio cuenta que me estaba pasando algo en los ojos. “Estás cambiando los colores”, me dijo. “Algo te pasa”. Ahí fue que busqué el primer oftalmólogo. Recorrí creo que doce o trece, con la esperanza de que los anteriores se hayan equivocado, pero es incurable ..En el primer  momento, te confieso que por primera vez en la vida, caí en un pozo de desesperación.  Pero me recuperé cuando un amigo que era médico y que también había quedado ciego, me dijo que el Instituto Braille lo había salvado .Y así fue.Fue mi salvación.

 

P: Porque pudo seguir leyendo...

R: Así es. Y así yo pude recomendar a muchísima gente que la salvación está allí.A veces estoy tan encantada con lo que estoy leyendo que como estoy sola y no molesto a nadie, soy capaz de leer hasta las 3 ó 4 de la mañana. En realidad no es leer, es escuchar, porque uso el sistema de las grabaciones, lo pongo abajo de la almohada y sigo escuchando..Creo que para el Braille mismo, la lectura al tacto, ya no tendría paciencia.

 

EL DESAFIO POLITICO

P: Y se interesa también por la política¿Cómo ve hoy la situación política actual?

R: Creo que hay un estupendo equipo presidencial y con muy buenas intenciones. Hemos tenido por suerte una época que nos ha hecho mucho bien económicamente, hemos podido vender productos uruguayos en buenas condiciones. Pero yo siempre digo que hay que pensar también en mañana. No podemos olvidarnos de dónde está Uruguay. No tenemos petróleo ni gas. Hay que pensar que si viene una sequía de ocho meses, las praderas desaparecen. Todas las cosas de las que vivimos, desaparecen. Por eso yo estoy del lado del ministro que dice que hay que repartir  lo mejor que se pueda pero hay que prepararse para posibles crisis, a las que tendremos que hacer frente sin nada. Vivimos de lo que nos puedan ayudar y vender los países vecinos, que están muy ajenos e indiferentes últimamente.  Por eso hay que pensar en lo que realmente es nuestro, lo que tenemos.

 

P: Y ésto lo maneja hoy el Frente Amplio, fundado por su esposo que soñó con verle rigiendo los destinos del país...

R: Así es.  Al Frente Amplio se entregó con alma y vida. Cuando llegaron los momentos difíciles con miles de presos en la cárcel, varias embajadas le ofrecieron irse al exterior, pero no quiso. La responsabilidad como Presidente del Frente, en el momento  en que había 4 ó 5.000 compañeros presos, era quedarse. Dijo que no se va a hacer llevar preso porque sí. No pensó que fuera lo ideal, pero corrió la misma suerte y corrió once años preso,  habiéndose podido ir del país.

Aclaro: ésto no es una crítica a los que se fueron, porque hicieron una labor de conocimiento  de lo que estaba pasando acá, todos los que se fueron al exterior..

 

P: Otro tipo de lucha.

R: Otro tipo de lucha, es verdad..Y cuando salió, salió sin rencores y sin odio. Eso es lo que la gente no comprende. Cada uno tiene su personalidad.  Dijo que había que seguir luchando. Y luchó, mientras pudo. Cuando ya en el año 1993, después de la dictadura y del nuevo funcionamiento del Frente,  sintió –de hecho ya lo había pensado antes- que había que dar lugar a gente más joven.  Ahí fue que lo sustituyó como Presidente, Tabaré, que era intendente. Seregni fundó el Centro de Estudios en el que se empieza a proponer las políticas del futuro, por ejemplo en temas como comercio exterior, energías de las que no disponemos,varios temas importantes para el país.  Así, hasta que se murió. Y se murió tres meses antes de que triunfara el Frente. Pero él, toda la vida, desde el primer día del 71, luchó pensando que algún día el Frente iba a ser gobierno. Incluso desde la cárcel a veces ponía una frasecita : “Al final del camino, una luz puntual nos espera”. Y es cierto.  El se murió, pobre, con mucho sufrimiento, tan poco antes del triunfo, pero contento, porque él ya veía que eso llegaba.

 

P: Se daba cuenta de que las cosas iban en esa dirección.

R: Claro. Y luchó  sin el menor interés político, porque desde que renunció a la presidencia del Frente, le ofrecieron muchas cosas, pero él decía que no, que igual él nunca iba a dejar de trabajar para el Frente.

 

 

P: Aunque ya en la fundación del Frente había una gran heterogeneidad de grupos ¿no le parece que quizás si él viera las discusiones de hoy, quizás el matiz de esas discusiones, diría que eso paraliza un poco?

R: Mientras él vivió, trató de tender puentes entre los grupos para que siguieran unidos todos. No lo pudo conseguir al principio porque antes de la dictadura el Partido Demócrata Cristiano y  la 99 se fueron ,. ya en el 72. En ese momento ya fue una pena. Fue cuando mataron a Michelini...Juan Pablo Terra me decía, estando preso Seregni: “Se terminó el Frente Lily, no existe más” ...

P: Y usted seguramente le decía que no, que ya verá que no..

R: Yo decía que no, que va a seguir porque todos los que están presos no van a salir a abandonar lo que fue su lucha, entre ellos Seregni.

 

UN DOLOR PERSONAL Y NACIONAL

P: ¿Cómo se vive once años sin su compañero de toda la vida al lado  y más que nada, sin saber qué le pasa o cómo terminaría todo aquello?

R: Vivía con la incertidumbre de no saber dónde estaba ni cuándo. Desde el mes de julio, que lo llevaron preso, hasta diciembre, no lo vi. No sabía ni cómo estaba. Después, le dieron una especie de libertad condicional, y una madrugada lo llevaron de nuevo y yo no sabía dónde estaba. Pasé como dos meses buscándolo por todos lados.

P. Cuando su esposo estaba preso ¿hubo momentos en los que pensó que no lo vería más?

R: Siempre. Lo pensábamos todas las mujeres, que  al día siguiente, quién sabe, y qué noticia nos traerán a la noche...y para ellos, los presos, también era una angustia terrible, sin saber qué podía pasar con la mujer, con los hijos...una vida muy triste.

 

P: Eso, pero acompañado de mucha fortaleza, lo viví a través del libro “El Correo del General-“, que nuestra amiga común ,nuestra muy querida Blanca Rodríguez, escribió, armó, compiló, con las cartas de Seregni desde prisión...

R: Así es. Blanca es una gran compañera, la quiero mucho. Y te cuento que volvió tan impresionada de Israel..

P: Es verdad,  lo compartió con nosotros en una preciosa entrevista que me concedió, además tuve el gustazo de recibirla en casa.

R: Volvió encantada del viaje....Respecto a lo que comentabas del espíritu de Seregni, es cierto. Sabes que hay gente que piensa que ahí , en el libro, tendría que haber mensajes de otro tipo, mensajes amorosos. Pero no se dan cuenta...como con Seregni nosotros nos comprendíamos tanto, en esa especie de carta que tenía que ver con la familia , con mi vida o mi soledad, siempre hay un mensaje político...Era la forma de tener a la mesa política al día. De eso también me ocupé bastante...

 

P: ¿Cómo se mantiene la conciencia política, para que todos estén al tanto, en medio de lo que era para usted en definitiva una tragedia personal?

R: Es que tú sabes que además, el preso busca siempre la forma de sobrevivir. Estaba escuchando hace poco a Rosencof sobre cómo pudo hacerse de un lápiz porque los soldados no sabían  escribir y le pedían que les escriba cartas a las novias. Me encantó eso, precioso, me causó tanta gracia...Seregni escribía en una forma como si no tuviera nada que ver, pero yo entendía todo. Además, un amigo le regaló a Bethel,nuestra hija mayor,  una radio chiquita, sin apariencia de nada , que parecía tan desvalida que le permitieron introducirla a la cárcel.