UN HECHO MUY NOTABLE, QUE NO MERECE OLVIDO

Según las tradiciones castellanas, la soberanía, concedida por Dios al Pueblo, era cedida a su vez por éste al Monarca "para ser ejercida, en el marco de las leyes, en pro del bien común. Y era entendido que si el titular de la Corona violaba las leyes y se hacía tirano o se hallaba impedido de ejercer su oficio de rey por coacción física o por pérdida de su capacidad de movimiento, raciocinio o salud mental -esfuerzo, maestría y seso que dijera el Rey Sabio en sus célebres Siete Partidas- el pueblo, propietario de la soberanía, quedaba facultado para reasumirla". Cuando Fernando VII cae prisionero de Napoleón, se dan las condiciones para que aquellas tradiciones fundantes del Derecho Político cobren impulso, tanto en España como en América.

En Montevideo, la creación de una Junta de Gobierno, estuvo a su vez justificada por la desconfianza sobre la lealtad del Virrey Liniers, cuyo enviado con el fin de subrogar al gobernador Elío, había sido expulsado de la ciudad en la noche del 20 de setiembre... y no de los mejores modos. "Tal el origen y fundamento, de honda raigambre popular, que movió a los actores del 21 de setiembre de 1808 en Montevideo, sin perjuicio de otras razones que, sin duda, obraron como factores coadyuvantes para determinar a cada uno, según sus particulares intereses sectoriales o personales, a asumir dicha actitud" (1).

En el acta capitular de ese día, consta que "...siendo las diez de la mañana, concurrió a las puertas de las casas capitulares, un inmenso pueblo que se difundía por toda la extensión de la Plaza Mayor, repitiendo los clamores de la noche anterior, insistiendo en sus pretensiones y en la celebración del Cabildo Abierto que se les había otorgado" y "para no irritar más al pueblo exaltado", los cabildantes "adoptaron el temperamento de permitir que eligiese a su albedrío un determinado número de sujetos por cuyo medio explicasen, sin confusión, sus instancias...". Primera vez que algo así ocurría.

Y así se constituyó la Asamblea de cincuenta y cinco miembros (entre ellos, los quince vecinos -"vecinos antiguos de esta ciudad, notoriamente acaudalados..."- elegidos directamente por la gente allí reunida). que ese mismo día aprobaría la constitución de una Junta de Gobierno, fiel al rey, pero reasumiendo fueros que éste estaba impedido de ejercer. Pivel Devoto, en su libro "Raíces coloniales de la revolución oriental de 1811" (Monteverde / Montevideo / 1952), analiza con detalle las múltiples circunstancias que anteceden al proceso revolucionario y sin los cuales no se explica su forja. Y entre ellas ("el arreglo de los campos", siempre diferido; el crecimiento del puerto; la ampliación de la jurisdicción de Montevideo y la afirmación de un sentimiento autonómico respecto a la sede virreinal, etc.), la formación de la Junta de Gobierno del año ocho ocupa un lugar principal.

El pasado 21 de setiembre se cumplieron 200 (doscientos) años de esos hechos. Los actos institucionales fueron ínfimos (2), nada en la ciudad -en su prensa, en el ámbito académico-, dieron la menor señal de que hubiera algo que conmemorar. Cosa que no impedirá, lo doy por bueno, mantener en ocasión del próximo Día del Patrimonio, un discurso políticamente correcto, con especial énfasis en el rescate de la memoria como factor de consolidación de un sentido de identidad y pertenencia. Algo nos está pasando....

NOTAS:

(1) Citas entrecomilladas, tomadas de Reyes Abadie y Vazquez Romero "Crónica General del Uruguay" / Banda Oriental / Mont: / 1981-Tomo II

(2) "El Parlamento de Montevideo realizó una Sesión Extraordinaria en homenaje al Primer Cabildo Abierto de Montevideo, realizado el 21 de setiembre de 1808. Este evento que conmemora aquel histórico momento de nuestra historia, se desarrolló en el Museo y Archivo Histórico Municipal "Cabildo de Montevideo", Juan Carlos Gómez 1362, el jueves 18 de setiembre a las 16:00 hrs.. Ante la relevancia de este festejo, el Legislativo Departamental suspendió la Sesión Ordinaria correspondiente a dicho jueves".

IMAGEN DE PORTADA: en ocasión del sesquicentenario, el Gobierno Departamental de Montevideo, erigió un monolito en la hoy llamada "plaza Clotilde Luisi". La placa de bronce -por suerte todavía en su sitio- luce esta leyenda: "21 de setiembre de 1808. En este día el pueblo de Montevideo, reunido en Cabildo Abierto, reasumió el ejercicio de su soberanía y formó la primera Junta de Gobierno de América. Fueron sus integrantes y defendieron la legitimidad de la Junta: (siguen los nombres de los asambleístas)". Cincuenta años después, el lugar no ha merecido ni un arreglo de circunstancias. Dos pancartas flamean irreverentes sobre el austero monumento; en una de ellas se lee: liquidación total. Nadie pensará que tenga alguna connotación fuera de la que le corresponde como cartel comercial.